Cine y audiovisual libres, autodefensa digital feminista, composición y producción musical, administración de servidorxs, cartografía, mantenimiento de computadoras, programación entre pares, gráfica y edición de publicaciones e incluso un laboratorio de baile, capoeria, salud autónoma y cocina vegana... desde sus inicios, el Rancho Electrónico ha ofrecido talleres a una pluralidad de asistentes que quieren aprender sin jerarquías ni temarios rígidos.